LA MAQUINA DEL TIEMPO

Mi abue, el pequeño tío Carlos y mi mamá, durante un paseo dominical (o quien sabe que día fue).
Mi abuelita con mi mamá, mi tío y la pequeña tía Lety.
Mi abue, mi mamá y mi tía Lety.

Si yo pudiera meterme a una de esas maquinas del tiempo que se ven en las películas por un día y transportarme a los años 60's, me dirigiría a la ciudad de Guadalajara, Jalisco.

Lo primero que haría sería canjear a algún ingenuo despistado mi ipod por dinero y me iría a buscar ropa de la época para que la gente no se asustara al verme. Me compraría una minifalda y botas largas y hasta me atrevería a usar una peluca copetona; De ahí, me dirigiría a la casa de mi abuelita y preguntaría por la Srita. María Eugenia. Sería sorprendente ver salir por esa puerta a mi mamá mas bonita y mucho mas joven que yo y conocerla. De seguro tendría puesto un vestido súper femenino con tacones bajitos, bolsa en mano y toda combinadita, porque mi mamá hasta hoy, aunque un día no salga, siempre anda muy arreglada, nada que ver con la salvaje de su hija.

No sé que pretexto inventaría para quedarme todo el día, igual y me haría pasar por una maestra o una prima lejana, y como en esos tiempos no había tanta inseguridad y aparte soy bien simpática (ajá...) de seguro mi abuelita me invitaría a cenar. Saludaría a un señor con algo de canas y bigotes que sé que es mi abuelo, pero no me haría mucho caso porque estaría con un paciente en el consultorio de la casa para hacerle una endodoncia. De paso y sin que se diera cuenta, agarraría unos chocolates blancos de huevito que tiene en la entrada. Subir al segundo piso y ver el cuarto de mi mamá, sus cosas, sus fotos, sería genial y la escucharía hablar para descubrir si tiene la misma personalidad que yo.

En la tarde la acompañaría a sus ensayos de teatro, y le pediría que me pichara una de esas malteadas fresas que hay en las esquinas de la ciudad mientras escuchamos al odioso, ñango y nada carismático de Enrique Guzmán, y ya con mas confianza me diría quienes son sus pretendientes, que ilusiones tiene y la veería convivir o pelearse con la pequeña tía Lety y sus demás hermanos. También estaría sorprendida de ver a un niño de ojos verdes muy peinadito (que de seguro es mi tío Jorge) sin sus acostumbradas greñas.

El tiempo se me agotaría, y la alarma que traería oculta abajo de mis botas sesenteras me indicarían que es hora de regresar, cuando en lo que me despido con muchos abrazos y besos, se me saldría el corazón al ver llegar a Salvador, el novio de mi mamá, que cuando me doy cuenta y voy desapareciendo resulta que era mi papá...

Regreso al mundo real porque oigo en el radio que Obama asumió la presidencia, cuando terca me vuelvo a meter a la máquina del tiempo, pero sin querer, me atraso aún mas en el tiempo y caigo a finales de los años 40's en la ciudad de Morelia Michoacán...Ahí me encontraría en una calle en el centro y se me acercaría un niño que vende chicles con la cara idéntica a la de mi sobrino Daniel, y es cuando me caería el veinte de que ese niño es mi papá...pero esa, es otra historia...
Un tío (no identifico que tío es), mi tío Antonio, mi papá y mi tío Manuel.