LOS PEQUEÑOS DETALLES
Mi papá siempre nos decía que los pequeños detalles hacían la diferencia en todo. Desde preguntar un ¿cómo te fue?, ver las nubes moverse o hasta que te dejen un café en tu buró hecho con mucho amor sin esperarlo. Eso se me quedó muy grabado y creo que tenía toda la razón. En estos tiempos donde cada vez perdemos mas la capacidad de asombro, la capacidad de valorar que abrimos los ojos y nos despertamos por la mañana, un saludo, una sonrisa correspondida, apreciar la naturaleza, hablarle o que te hable un amigo para saber cómo estás y mil etcéteras más, creo que necesitamos parar y valorar y podemos empezar a ver lo que tenemos a nuestro alrededor, así tengamos problemas, estemos agobiados o la rutina nos esté matando. Ayer por ejemplo para mi fue un día muy común, un día igual que otro que se fue convirtiendo en un día especial. En la tarde fui por Domy al colegio como hago cada día (cosa que agradezco mucho porque 6 de sus 8 años casi nunca había ido por ella, siempre se había...