SEÑORA DE LAS 3 DECADAS Y CACHO...

La palabra que no he podido superar todavía es que me digan Señora.
¡Ingales!, de porsi suena super veterana y como para decírsela a mi suegra o a alguna amiga de mi mamá. pero no para mi.
Se supone que desde que te casas ya eres una señora, pero como casi nunca uso mi apellido de casada mas que cuando me dan alguna invitación de boda, ahi si soy la señora de...

Cuando me dicen señora y ando con ropa de vestir, pienso que puede ser por la ropa, pero ya que te digan señora cuando andas en chanclas, brochecitos en el pelo y mezclilla ya es de preocuparse.

Paty, 2 años mas chica que yo, también se sorprende, y no lo puede entender aunque la vean con su panza de casi nueve meses y una niña de 2 años.
Ayer hablé con ella por teléfono, y aunque sigue siendo la misma loca de siempre, ya usa palabras como "mi vida" "que le vamos hacer" y "ya mi cielo". Ésta vez platicamos muchas cosas como siempre pero de repente se agarró como una hora hablando de como había hecho unas empanadas y que ahora si le salía bien el arroz con leche; yo muy atenta la escuché pero no tenía ningún comentario acerca de su "interesante" conversación. Me quedé callada y la dejé a que solita se diera cuenta lo señorial que se escucha hasta que ella misma se percató de como se escuchaba y le dio pánico señorial y cuando hizo pausa y reflexionó me dijo: "que aburrida es mi platica verdad, yo misma ya me di hueva", y caimos en la cuenta que aunque no lo queramos aceptar ya somos unas "ñoras" treintañeras y cacho, y no nos queda mas que aceptar que ya no nos vemos tan chavas y retardarlo lo mas que se pueda, mas nunca caer como la Cecy Gutierrez que no quiere aceptar que ya esta ruca y se sigue vistiendo como quinceañera.

Ni modo, es parte de madurar. Todavía recuerdo hace pocos años cuando tocaban a la puerta de mi casa y me preguntaban si estaba mi mamá , ahora van directo al "Señora buenos dias".